CRISTO DAME VIDA

La experiencia ante la propia muerte cambia la creencia en la existencia de Dios: el caso de Chávez

Una investigación ha corroborado que ante la experiencia de la muerte de uno mismo, los ateos dudan de sus creencias ateas, como tratando de aferrarse a la esperanza de que la vida no se termina ahí, o sea que Dios existe.

Fuente: Agencias, NC, SdeT.

Y esto lo vemos con el presidente venezolano Chávez, que nunca se caracterizó por ser medianamente cristiano y hasta ha estado enfrentado con los grupos cristianos de su país. Sin embargo, en una reciente misa, luego que su cáncer reapareció, lloró y oró pidiendo a Dios que no lo lleve todavía y a Cristo que le dé su cruz.  

PENSAR EN LA MUERTE AUMENTA LA FE DE LOS ATEOS DICE UN ESTUDIO

 

¿Qué sucede después de la muerte? Esto deja con fe incluso aquellos que no creen en Dios, de acuerdo con un estudio realizado por la Universidad de Otago en Nueva Zelanda. En vista de que los ateos tienen menos certeza de la no existencia de Dios, aunque esta cuestión surge inconscientemente.

El departamento de psicología de la Universidad, entrevistó a 265 estudiantes universitarios ateos y religiosos.

Se dividieron en dos grupos, uno escribió sobre su propia muerte y otros acerca de lo que vieron en la televisión.

Los estudiantes religiosos que escribieron acerca de su muerte demostraron tener más fe en su creencia que los religiosos que escriben acerca de la televisión. Prueba de estos estudiantes conscientemente, la investigación ha demostrado lo contrario en relación con los ateos: el grupo que escribió acerca de la muerte era más escéptico.

Sin embargo, el resultado de la prueba fue cambiando el inconsciente, que muestra que los ateos han encontrado que es más difícil negar la existencia de Dios. Para llegar al inconsciente, los investigadores midieron la velocidad en la que los participantes de este estudio pulsaban el botón para admitir o negar la existencia de Dios.

Los ateos, una vez que escribieron acerca de su propia muerte, apretaron el botón que negaba la existencia de Dios, pero se dilataron mucho tiempo para hacerlo, mientras que los religiosos apretaron el botón mucho más rápido, demostrando que estaban seguros en sus creencias.

“El miedo a la muerte es una experiencia casi universal y las creencias religiosas parecen ayudar a lidiar con esta ansiedad”, dijo el profesor Jamin Halberstadt, co-autor del estudio que se publicará en el próximo número de la revista Journal of Experimental Social Psychology.

“Como ahora sabemos, estas creencias actúan tanto a nivel consciente e inconsciente, lo que permite incluso a los autoproclamados ateos obtener beneficios de ellos”, dijo el investigador.

UNA PLEGARIA POR SU SALUD

 

Conmovido, el presidente venezolano habló en una misa. Pidió tener vida, a raíz del cáncer que lo afecta desde hace meses. Y recalcó que no le importaba que sea dolorosa: “Dame tu cruz, 100 cruces, que yo las llevo”.

El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, pidió anteayer a Dios “vida” en un dramático deseo de semana santa, horas después de haber regresado de Cuba, donde se aplicó una segunda sesión de radioterapia contra la recurrencia del cáncer.

“Todavía me quedan cosas por hacer por este pueblo y por esta patria, no me lleves todavía“, exclamó en una misa en la que participaron sus familiares más cercanos.

“Dame vida. Que sea vida llameante, vida dolorosa, no me importa. Dame tu corona, Cristo. Dámela que yo sangro, dame tu cruz, 100 cruces, que yo las llevo, pero dame vida. No me lleves todavía, dame tus espinas, dame tu sangre, que yo estoy dispuesto a llevarla pero con vida”, agregó durante la eucaristía realizada en su región natal de Barinas por su salud.

El mandatario habló ante sus familiares y en un momento se le quebró la voz y dejó correr unas lágrimas, según mostró una transmisión del canal oficial Venezolana de Televisión.

Dijo que su vida dentro de la revolución bolivariana “no ha sido fácil” y admitió haberse conmovido por el abrazo de su madre y su padre, Elena y Hugo de los Reyes.

“Si todo lo que uno ha vivido no ha sido suficiente sino que me faltaba esto, bienvenido, pero dame vida, aunque sea vida llameante. Dame tu corona Cristo, dámela que yo sangro, dame tu cruz, 100 cruces, pero dame vida porque todavía me quedan cosas por hacer por este pueblo y por esta patria”, agregó.

Visiblemente conmovido, Chávez dijo que no pudo evitar soltar lágrimas e indicó que hace tiempo asumió que padece una enfermedad maligna.

“Es una verdadera amenaza que le marca el fin del camino a mucha gente, es la verdad”, señaló al referirse al cáncer que padece. “Estoy convencido que dios ayuda a Chávez y a sus amigos”, añadió.

El mandatario retornó al país, después de recibir la segunda sesión de radioterapia contra la recurrencia del cáncer.

Chávez había viajado a La Habana el sábado pasado, a fin de someterse a las correspondientes cinco sesiones de radioterapia, como explicó al país.

Chávez fue operado el 26 de febrero pasado de un tumor por la recurrencia del cáncer y desde un mes después recibe la radioterapia. En junio del año pasado fue intervenido para extirparle un primer tumor y luego recibió un tratamiento con quimioterapia.