EL ESPIRITU NOS TRANSFORMA

"No os conforméis, sino transformaos"  

Rom. 12,2

By: Mariam | Alianza de Amor

Alguien escribió: “A los humanos nos gusta imaginar que somos una raza de individuos duros, como algunos héroes de la historia, o como “llaneros solitarios”.  Pero la realidad es que odiamos parecer diferentes, por miedo a ser excluidos y rechazados, o a que nos tilden de fanáticos. Para evitarlo, nos conformamos a este mundo. Es una característica que se puede ver en los niños, con su deseo de agradar, en los adolescentes, para quienes seguir la corriente del grupo es tan importante, y en los adultos, cuando trabajamos todas las horas del día para tener lo mismo que el vecino.

 "Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional.  No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta."  Rom. 12,1-2.  El ser diferentes, no tiene ningún valor, y hasta puede ser contrapruducente.  Lo que Dios busca en nosotros es la disposición a ser transformados radicalmente y para lograr esta meta, tengamos en cuenta: 

1. La transformación empieza por uno mismo.  Tu como creyente no podrás romper el control que ejerce el mundo sobre él sin Cristo Jesús, pero se nos ha prometido que "Hijitos, vosotros sois de Dios, y los habéis vencido; porque el que en vosotros está, es mayor que el que está en el mundo."  1Jn. 4,4.  El Espíritu Santo que esta en cada uno de nosotros nos capacita para resistir las presiones de este mundo caótico para sigamos presentes en la transformación de él.
2. Dios nos llama y ese llamado es urgente.  Suplicar es rogar e instar; este llamado no es optativo, sino vital, es un llamado imperioso, pues viene de Dios, pues Él busca instrumentos dispuestos a ser transformados, ¿tu estas dispuesto a decir  "usame a mi"?